Así lo revela el informe más reciente del Banco de España sobre la situación financiera de los hogares, que indica que el 47,2% de los contratos hipotecarios actuales son unipersonales, frente al 44,8% de hace un año. Este aumento de 2,4 puntos porcentuales en tan solo doce meses refleja un cambio significativo en el perfil de quienes acceden a una vivienda, donde cada vez es más habitual hacerlo sin pareja. Esta evolución se suma al alargamiento del plazo de amortización de los préstamos, que ha crecido en más de siete meses durante el último año, alcanzando una duración media de 324,8 meses, es decir, unos 27 años. Además, se observa que los compradores solicitan hipotecas a una edad ligeramente más temprana: la media ha bajado de 40,9 a 40,3 años. Por otro lado, los préstamos a tipo fijo también han ganado protagonismo, representando ahora el 63,9% del total, frente al 61,7% registrado el año anterior.
FUENTE PERIODÍSTICA LA VANGUARDIA